Siempre me ha gustado el deporte pero odiaba correr. Me ahogaba me asfixiaba, hasta que un día comprendi que el truco era olvidarse de la velocidad a la que corren los demás y aprender a disfrutar del camino.
Soy un corredor malo, muy malo, pero me encanta correr....y nadar y el ciclismo, así que me hice triatleta. Ahora sueño con ser capaz, algún día, de llegar a Kona.
1 comentario
Es espectacular cómo mueve el tío las piernas, que parece que va flotando. Me recuerda a los dibujos del correcaminos